sábado, 23 de octubre de 2010

La (sutil) diferencia entre delgada y esquelética

Hace unas semanas que retomé mi trabajo haciendo books para una agencia de modelos.
Cierto es que no es el trabajo más gratificante del mundo, pero por ahora me mantiene ocupada y bastante entretenida. Como punto (muy) positivo, siempre conoces a alguien interesante (si, no todas las modelos son gili****as).
El dilema empieza en el momento en el que des
pués de hacer lo que yo considero una buena sesión de fotos, mi superior considera que la modelo tiene aspectos de su cuerpo mejorables.Y en esos casos, qué haces?
Por un lado tu apego hacia tu trabajo a veces dificulta la tarea de hacer grandes cambios a la foto cruda (color, textura, forma, e
tc.), pero por otro lado quizás te pica el gusanillo de la moralidad y surgen preguntas tales como, ¿es ético licuar a una modelo que a duras penas llega a los 58 kg de peso?
Y más profesionalmente, ¿es estético?


Aquí os planteo mi duda.


Por supuesto, como profesional debes de hacer aquello que el cliente pide, que en este caso está estrictamente regido por los cánones que marcan las revistas y la moda en sí misma.
Por lo tanto se genera un dilema moral,¿debes o no debes modificar tu trabajo, que suele estar sujeto a tus valores personales, a cambio de poder tener un hueco dentro del voraz y salvaje (pero apasion
ante) mundo de la moda?

Ante todo creo que debo de aprender a ser buena profesional y estoy segura que este trabajo me ayudará a conseguirlo.
Pero mi blog es mi templo y he decidido que os voy a mostrar las fotos terminadas pero sin modificar el cuerpo de la modelo, que me parece una monada.

Sentiros libres de opinar.




















viernes, 1 de octubre de 2010

Kismet Magazine

Y al fin llegó! ^^








Y en la próxima actualización subiré la editorial completa y como sufrimos para sacarla adelante.

Espero que os guste!

(que alegría, que alegría!!!!)